

Dudar de que los problemas actuales de la economía estadounidense tengan alguna causa que no sea la presencia de un Estado intervencionista y autoritario es apostasía. Que los estadounidenses se aquieten y reciten el catequismo: «El mercado me lo da, el mercado me lo quita: alabado sea el nombre del mercado». Para hacer frente a desafíos como el ascenso de China y el cambio climático, Estados Unidos debe «recordar lo que dio impulso a su larga y exitosa historia».Ĭomo siempre, The Economist se inclina ante el dogma neoliberal con la actitud santurrona y convencida del creyente. Los autores reconocen que la «apertura estadounidense» generó prosperidad para empresas y consumidores, pero también señalan que el expresidente Donald Trump y su sucesor Joe Biden «viraron al proteccionismo», y advierten de que los subsidios pueden estimular la inversión a corto plazo pero «terminan afianzando conductas de lobby » costosas y distorsivas. Los autores exhortan a los desalentados estadounidenses a estar felices por la «espectacular historia de éxito» de su país y luego insisten con la condescendencia: «cuando los estadounidenses piensan que su economía es un problema que demanda correcciones, es allí cuando más probable es que sus políticos arruinen los próximos treinta años». Un buen ejemplo de ello es un artículo reciente que celebra el « asombroso registro económico» de los Estados Unidos. Pero el paradigma económico en el que se basaron el thatcherismo, la «Reaganomics» y el Consenso de Washington sigue vivo y coleando en al menos un lugar: las páginas de The Economist. Después de que cuarenta años de desregulación, financierización y globalización no generaron prosperidad para nadie excepto para los ricos, parece que Estados Unidos y otras democracias liberales de Occidente han dejado atrás el experimento neoliberal y vuelven a adoptar la política industrial. Determined to write about the little known stories, he is the author of several books including 'Breslau 1945: El ultimo bastion del Reich', 'Fuerzas acorazadas hungaras 1939-45', 'The Spanish in the SS and Wehrmacht.1944-45', 'The Bulgarian Air Force in World War II', 'Aeronautica Nazionale Repubblicana 1943-45' and 'Romanian Armored Forces in World War II'.BERKELEY – La última década no ha sido buena para el neoliberalismo. In this text we will remember the amazing history of these made in Spain aircraft.ġ32 archival photographs and 12 colour profiles covered in these 80 pages, which also serves as a great referenten for scale modelingĮduardo Manuel Gil Martinez has been interested in history for many years, particularly the Second World War. Fortunately even today some of the HA-1112s fly majestic as worthy descendants of the great aircraft that was and always will be the Messerschmitt Bf 109. These aircraft manufactured in Spain enlarged the Bf 109 life about 20 years since the end of World War 2 because continued in active service until 1965 coexisting with the 2nd and the 3rd generation jet.
#El ultimo bastion license
When Spain acquired the manufacturing under license of the Bf 109 G-2 began the history of the Messerschmitt Bf 109s made in Spain, which gave rise to two aircraft such as the HA-1109 and the HA-1112, with several subtypes. Only a few months since the maiden flight, three prototypes were sent to Spain to be tested during the Spanish Civil War and shortly after Spain bought E and F series. The Messerschmitt Bf 109 was without doubts one of the most important airplanes in the history of aviation and since the beginning its history was linked to Spain.
